viernes, 23 de octubre de 2015

Tratamiento de los trastornos disociativos

Debido a que los trastornos disociativos suelen relacionarse con eventos estresantes, es muy importante controlar aquellos factores que estén generando niveles intensos de estrés.


La psicoterapia es indispensable para tratar este tipo de trastorno ya que mediante de esta la persona aprende a desarrollar técnicas para afrontar el estrés sin disociarse, así tambien se abordan los sucesos traumáticos que desencadenaron el trastorno para lograr una mejor comprensión y aceptación reintegrando la personalidad y recuperando la funcionabilidad social de la persona.


Tambien existen medicamentos que ayudan a dísminuir todos los sintomas de ansiedad, angustia, disforia u otros que frecuentemente se asocian a estos trastornos.


miércoles, 21 de octubre de 2015

¿Que originan los trastornos disociativos?

Los trastornos disociativos se originan como consecuencia de acontecimientos de la vida estresantes, como abusos, violencia, accidentes y desastres naturales que la persona ha experimentado.


Hay que realizar todo tipo de exploraciones clínicas y de laboratorio que comprueben la ausencia de cualquier enfermedad que pueda explicar los síntomas que experimenta la persona.



Una característica muy importante para determinar la presencia de este trastorno es que los síntomas aparecen bajo la presencia de nuevos eventos estresantes y desaparecen al resolverse la problemática.



viernes, 16 de octubre de 2015

Tratamiento de los Tics o movimientos involuntarios

El manejo de los tics en general no es simple. Es preciso identificar los tics (tipo, cronicidad, intensidad, localización), clasificar el tipo de trastorno (transitorio, crónico simple, etc.), delimitar los trastornos asociados, determinar el impacto que tanto los tics como los trastornos asociados causan sobre el individuo, definir qué síntomas requieren tratamiento y decidir qué profesionales han de participar en él. Esto requiere contemplar al individuo como un todo, no sólo como alguien con tics. Se necesita la colaboración del sujeto y, especialmente si se trata de un niño, de la familia, con el fin de reconstruir la historia del proceso, los factores que empeoran o mejoran los síntomas y, sobre todo, el funcionamiento del individuo.


No disponemos de un buen medicamento antitic. Esto debe quedar bien claro tanto para el paciente y su familia como para el médico. Ninguno de los medicamentos de los que disponemos es totalmente efectivo en una fase aguda. La mayoría de los medicamentos requieren un uso prolongado. Además, no están exentos de potenciales efectos secundarios importantes.
Se han utilizado dos tipos de medicamentos para el tratamiento sintomático de los tics: neurolépticos típicos y atípicos y agonistas a2-adrenérgicos.


En los últimos años se ha extendido el uso de neurolépticos atípicos, de los que los más empleados son la risperidona y la ziprasidona. Se ha sugerido que la risperidona (un potente antagonista dopaminérgico y serotoninérgico) es un producto eficaz en las personas con tics y trastorno obsesivo-compulsivo. Algunos autores, prefieren iniciar el tratamiento en personas con sintomatología moderada, con agonistas a2-adrenérgicos, concretamente con clonidina.




miércoles, 14 de octubre de 2015

Tipos de Tics o movimientos involuntarios

Los tics son muy variados. Se dividen en motores y vocales o fónicos. Los tics motores pueden expresarse con movimientos elementales de un músculo o grupo reducido de músculos (tic motor simple) tales como parpadear, encoger los hombros, girar la cabeza hacia un lado, desviar los ojos hacia arriba, etc. También pueden expresarse con movimientos en los que participan varios grupos musculares, como extender un brazo al tiempo que se tuerce la cabeza hacia un lado. Incluso puede consistir en actos elaborados (p. ej., rascarse una pierna o desplazar hacia atrás el cabello) (tic motor complejo). 


La variedad expresiva de los tics motores es extraordinaria. Tics motores raros pueden ser: movimientos complejos de los globos oculares, contracciones rítmicas de la musculatura abdominal (rechtig) o incluso movimientos con las orejas. Su brusquedad puede ser tan intensa como para producir luxaciones o traumatismos. Aunque generalmente bruscos, algunas veces el acto motor puede ser sostenido y lento, dando la apariencia de un movimiento distónico (tic distónico). 
Generalmente son indoloros, pero si se repiten con mucha frecuencia pueden provocar mialgia postejercicio («agujetas»), conjuntivitis mecánica o ulceraciones (p. ej., en la mucosa de la mejilla).
 
El ticqueur puede usar el paso del aire a través de la nariz o la boca para producir tics sonoros. Este tipo de tic (tic fónico) suele expresarse como carraspeo o sonidos guturales de muy variada expresión: chillidos semejando ladridos, tos, arrullo de paloma, etc. Haciendo un paralelismo con la división de los tics motores en simples y complejos, los tics fónicos pueden ser simples, como los que
acabamos de mencionar, o, a semejanza de los tics motores complejos, hacer uso del lenguaje hablado: repetir las últimas sílabas de las palabras del interlocutor (ecolalia) o las del propio paciente (palilalia), o incluso emitir palabras insultantes, obscenas o blasfemas (coprolalia). Esta última modalidad de tic fónico, aunque ocurre en menos del 10 % de los niños con trastorno de Gilles de la Tourette, tiene interés histórico, puesto que figura en el título de la descripción inicial de este trastorno. Tics nasales de inspiración o emisión de aire son relativamente frecuentes.


lunes, 12 de octubre de 2015

Tics o movimientos involuntarios

Los tics son los movimientos involuntarios anormales más frecuentes en el niño y uno de los más prevalentes en el adulto. Pero su importancia no reside únicamente en este hecho, sino en su carácter «semiinvoluntario», en su parentesco con conductas motrices peculiares de cada individuo, como son los manierismos, y en su frecuente asociación con trastornos neuroconductuales también de elevada prevalencia, como el trastorno por déficit de atención con hiperactividad (TDAH) y el trastorno obsesivo-compulsivo, con lo que, por todo ello, puede afirmarse sin exagerar que los tics desbordan el marco conceptual de la patología del movimiento. Limitarse a considerar los tics únicamente sobre la base de su fenomenología motriz y fónica sería un error reduccionista con consecuencias negativas, sobre todo en su manejo terapéutico.


Posiblemente las primeras nociones que tenemos de los tics en medicina moderna daten de principios del siglo xix, cuando Bouteille diferencia algunas «muecas faciales» de los movimientos coreicos y los denomina «falsas coreas». Hitos significativos en su conocimiento han sido la descripción por Gilles de la Tourette (1885) del trastorno que lleva su nombre, el hallazgo de la eficacia terapéutica del haloperidol, lo que apoyó con fuerza su base biológica, y el reconocimiento de su frecuente asociación con otros trastornos neuroconductuales.


La palabra tic se usa para designar tanto un signo como un trastorno. Como signo, los tics son movimientos o vocalizaciones repetitivos, estereotipados, involuntarios, bruscos, inoportunos, intempestivos, no propositivos y absurdos. Son bastante fáciles de reconocer, pero bastante difíciles de describir.


viernes, 9 de octubre de 2015

Tratamiento de los trastornos delirantes.

El tratamiento de los trastornos delirantes es particularmente difícil.


El principal problema es la pobre conciencia de la enfermedad por parte de las personas que lo padecen, negándose a cualquier tipo de ayuda o tratamiento.

El abordaje debe ser integral con psicoterapia y medicamentos que ayudan a que desaparezcan estos pensamientos erróneos.

Es muy importante luchar contra el aislamiento que el miedo de estas ideas pueda generar.

La familia juega un papel fundamental en la detección, evaluación y seguimiento del paciente, así como en las recaídas que podrian ocurrir.


jueves, 8 de octubre de 2015

Ideas delirantes más frecuentes.

Los trastornos de ideas delirantes pueden presentar muchas tematicas, hoy les presentamos las ideas delirantes que con más frecuencia estan presentes en las personas que tienen dicho trastorno.

-Delirio persecutorio: es el tipo más frecuente, la persona cree ser perseguido y sospecha ser objeto de conversaciones o actos en su contra. Pasa la mayor parte del tiempo suspicaz, alerta, desconfiado y con miedo.


-Delirio hipocondriaco: la persona tiene la seguridad de presentar una enfermedad sin tener evidencias objetivas, siendo imposible covencerlo de lo contrario a pesar de hacerle todas las evaluaciones o pruebas necesarias para descartar la enfermedad.

-Delirio celotipico: la persona esta convencida que la pareja le es infiel sin tener fundamentos en sus acusaciones, la persona acecha y acosa a su pareja.


-Delirio erotomaníaco: la persona cree que otra persona, generalmente famosa o inalcanzable, esta enamorada de el o ella y que mediante señales ocultas se lo hace saber.

-Delirio de grandiosidad: la persona se cree superior a los demas ya que imagina que tiene titulos de nobleza, dinero o poderes fantásticos.


miércoles, 7 de octubre de 2015

Trastornos de ideas delirantes

El trastorno de ideas delirante es una enfermedad caracterizada por presentar ideas delirantes bien definidas en una persona que mantiene muchos aspectos normales de su personalidad.

Estas personas a pesar de presentar delirios pueden desempeñarse laboralmente y mantienen relaciones con otras personas, aunque su vida se ve afectada cada vez más por la intensidad e intrusividad de estas ideas.


La Organización Mundial de Salud a través de la Clasificación Internacional de Enfermedades presenta los siguientes criterios diagnosticos:
-Presencia de una idea delirante or un grupo de ideas delirantes relacionadas entre si, distintas a las indicadas como tipicamente de esquizofrenia.
-Las ideas delirantes deben estar presentes por lo menos 3 meses.
-No deben presentarse alucinaciones de ningun tipo.
-Pueden presentarse algunos sintomas depresivos.
-No hay evidencia de lesiones cerebrales ni consumo de drogas.

martes, 6 de octubre de 2015

Delirio ¿Que es?

La palabra delirio proviene del latin delirare "salirse del surco al labrar la tierra".
Tradicionalmente se dice que una persona tiene delirios cuando cree cosas falsas, fuera de lugar o relata hechos imposibles.
Detras de estos relatos hay una enfermedad física o mental que afecta el sistema nervioso central.

¿Pero que características tiene que cumplir una idea para considerarse delirante?
-Que sean falsas e ilogicas.
-Que no se pueda corregir a pesar de demostrar pruebas claras de que se encuentra en un error.
-Que no la compartan las personas propias de su cultura.
-Que no le cause malestar el pensar de esa manera.



Los delirios puede estar presentes acompañados con otra sintomatologia en muchas enfermedades como esquizofrenia, depresiones graves, trastornos bipolares o puede presentarse de forma exclusiva llamandosele a este trastorno de ideas delirantes persistentes.

Las personas con ideas delirantes cada día que pasa se convencen más de la veracidad de sus pensamiento erroneos por lo que es necesario que los familiares al detectar la presencia de estas busquen ayuda.