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lunes, 28 de septiembre de 2015

Evolución de la Esquizofrenia



¿Qué ocurre con nuestro paciente desde que empieza la enfermedad hasta el final de sus días?


En primer lugar hay que aclarar que la esquizofrenia es una enfermedad engañosa que nunca es igual de una persona a otra, porque surge de repente o lentamente sin motivos, claros que lo justifiquen y va discurriendo en forma de brotes, es decir, no de un manera continua sino en periodos en que nuestro paciente está muy mal y entre estos periodos el paciente está “casi normal”, por ello el pronóstico no es seguro y nadie puede “profetizar” sin riesgo a equivocarse.

 
Desde hace muchos años se viene hablando de la llamada regla de los tercio según la cual un tercio de los pacientes solo tendrán un brote en su vida, otro tercio pasará por varios brotes y el último tercio persistirá con la enfermedad activa de manera constante aunque con altibajo y a veces a pesar de la medicaciones. 

También se acepta, en general, que cuanto más grave e intenso es un brote, más daño hace al paciente y más mermado le deja, de tal forma que puede darse el caso de un paciente que con un solo episodio esquizofrénico en su vida quede más incapacitado que otro con varios.

Respecto al estado en que nuestros pacientes quedan, lo que los médicos llaman el pronóstico, parece haber un consenso por el cual un 25% de ellos, tras uno o varios brotes quedan muy restablecidos y pueden afrontar los retos de la vida diaria con satisfacción, otro 25% queda tan mermado que precisa de forma constante ayuda profesional extrafamiliar y el resto, o sea, el otro 50% evoluciona de manera inconstante con necesidades irregulares de asistencia profesional pero, en su mayoría con dificultades para llevar adelante un proyecto serio de vida, en este grupo la familia es básica.
Esta evolución impredecible y poco homogénea no sólo desconcierta a la familia, amigos y profesionales, sino que es un hándicap importante a la hora de recibir ayuda. 


Y hay que dejar también muy claro que la evolución de una esquizofrenia va a depender en gran medida de condiciones sociofamiliares y culturales, en ocasiones de manera definitiva. En este sentido la esquizofrenia evolucionará mejor cuanto más apoyo tenga y más rápidamente se instaure éste, con tratamientos farmacológicos acertados y administrados de manera constante, la evitación de situaciones de riesgo (alcohol, drogas, estrés), la instauración de medidas psicorehabilitadoras y de integración, y sobre todo la comprensión, el cariño y la ayuda de la familia y los amigos, elemento, éste último, primordial. 


jueves, 24 de septiembre de 2015

¿Qué es la ESQUIZOFRENIA?



En consenso todos los profesionales de la salud mental y la Organización Mundial de la Salud (OMS) definimos a una persona con esquizofrenia aquellas personas que, sin motivo aparente, presentan una conducta anómala que dura más de un mes ininterrumpidamente y que se caracteriza por distorsión de la percepción, del pensamiento y de las emociones, creyendo el sujeto afectado por esta situación, que sus sentimiento, pensamientos y actos más íntimos son compartidos por las demás personas llegando a sentirse de forma enfermiza el centro de todo cuanto ocurre.
Así pues y mientras nadie demuestre lo contrario podemos, avalados por la OMS, hablar de la esquizofrenia como una enfermedad que va a romper bruscamente la línea vital de la persona y va a condicionar su futuro y el de sus familiares y amigos.
Estamos pues ante un desorden cerebral que deteriora la capacidad de las personas para pensar, dominar sus emociones, tomar decisiones y relacionarse con los demás. Es una enfermedad crónica, compleja que, al igual que ocurre con la epilepsia, la diabetes o muchas otras dolencias de larga evolución, no afecta por igual a todos los pacientes.


En tres de cada cuatro casos se detectan los primeros síntomas entre los 16 y los 25 años de edad, afectando por igual hombres y a mujeres de cualquier país, cultura o estatus socioeconómico. Suele afectar más gravemente a la persona cuanto poco frecuentes, tienen mal pronóstico. En las mujeres suelen empezar algunos años más tarde, motivo por el que su evolución es más benigna que en los varones. 


viernes, 18 de septiembre de 2015

La familia, clave de la buena salud mental.

La familia es un grupo de personas que conviven y se apoyan mutuamente primordialmente por relaciones de filiación o pareja.
Cada miembro es único y tiene necesidades particulares de acuerdo a su edad y condición, las cuales son suplidas por su propio esfuerzo con el apoyo de los otros miembros.
Cuando todas estas necesidades son satisfechas, hay buena comunicación y armonía entre los miembros de la familia la probabilidad de la aparición de un trastorno mental es baja.
Una buena integración familiar previene el aparecimiento de trastornos mentales.


Los cambios de conducta en las personas debido a un trastorno mental son desadaptativos, se alejan de las personas amadas, abandonan el trabajo y todas actividades sociales como los amigos y llegan incluso hasta ser incapaces de salir de su casa.
Los familiares más cercanos, en especial los padres o la pareja, suelen preocuparse mucho e intentan incentivarlo a buscar ayuda, cuando las consecuencias de sus conductas son muy evidentes.
La persona afectada suele negarse a recibir cualquier ayuda, es entonces cuando la familia entra en la encrucijada entre respetar la autonomía de la persona y obligarlo a recibir ayuda.
Ya que muchos son problemas en los que no esta en riesgo la vida de la persona, optan por no presionar a su familiar y dejan que el problema empeore y se cronifique.
Lo correcto en estos casos es que los otros miembros de la familia se empoderen del problema del familiar afectado y buscar ayuda profesional para la restauración de su salud.


martes, 9 de junio de 2015

¿Salud Mental?

¿Qué es la Salud Mental? ¿En qué consiste? ¿Cuándo se tiene Salud Mental y cuando no? ¿Quién tiene un trastorno mental? ¿Quién está "loco"?

Si hay una línea que divide a la normalidad de la anormalidad, ¿cómo podemos decidir el momento en que se ha cruzado? Muchas personas que padecen problemas mentales serios funcionan cuando menos de forma mínimamente adecuada en ciertos aspectos de sus vidas. Otras, que parecen normales, tienen una idiosincrasia fastidiosa o molesta. ¿Cuál es el papel de la Salud Mental en estos casos?  

Aunque algunos de los problemas psicológicos y/o psiquiátricos no se encuentran claramente en el ámbito de la normalidad (por ejemplo, la incapacidad para sostener cuando menos relaciones mínimas con otras personas, o sufrir de alucinaciones o ideas delirantes), no siempre resulta sencillo determinar entre lo normal y lo anormal. Identificar a las personas aquejadas mentalmente y ayudarlas requiere del juicio y la atención de un profesional de la Salud Mental.


Muchas personas a pesar del malestar que padecen no consultan porque desconocen que están atravesando por un problema psicológico o psiquiátrico y adolecen su malestar al "estrés normal de la vida".

Identificar un Trastorno o un problema de Salud Mental


Términos como “trastorno mental”, “conducta anormal” y “enfermedad mental” comprenden una amplia variedad de problemas que van desde los que son privados en el sentido de que el resto de las personas puede no percibir que alguien sufre de ansiedad, hasta tragedias públicas como la personificada por asesinos seriales. Algunos síntomas que parecían relativamente ligeros pueden, sin embargo, tener importantes consecuencias. Por ejemplo, la depresión ligera experimentada durante un largo periodo puede estar relacionada con trastornos físicos, bajo rendimiento escolar, incapacidad para conservar un empleo, dificultad para entablar y conservar amistades, problemas maritales, conductas inadecuadas como padre de familia e incapacidad general para adaptarse a la sociedad.

Veamos algunos casos sencillos pero importantes a la hora en que algunas personas expresan síntomas que podrían padecer de un padecimiento mental o que podría beneficiarse de una atención adecuada e integral:

➤ Baja autoestima (“No soy bueno”)
➤ Distorsión de la realidad (“Todos están en mi contra”)
➤ Menor competencia (por ejemplo, social y laboral)
➤ Ansiedad (“Me siento tenso todo el tiempo”)
➤ Depresión (“La vida no vale la pena”)
➤ Ira (“Me enfurezco veinte veces al día”)
➤ Reactividad fisiológica intensificada (por ejemplo, taquicardia e hipertensión)

La mayoría de las personas que tienen problemas de salud mental hacen mención de la ansiedad que experimentan. Existe una amplia variedad de fuentes de estrés y de la forma en que se expresan.
Algunas veces la angustia es provocada por una situación de vida fácilmente identificable (por ejemplo, la pérdida de un empleo), mientras que en otros casos la fuente parece estar más dentro de la persona misma en lugar de provenir del ambiente que lo rodea. Además de la variedad de fuentes, hay también diversidad en cuanto a la forma en que se expresa la angustia.

¿Como buscar ayuda? ¿Cuál es el primer paso?

Muchas personas que sufren de alguna enfermedad mental no reciben ningún tratamiento profesional debido al costo que éste representa, a la falta de instalaciones clínicas cercanas o debido a que por diversas razones no buscan ayuda.


Razones para buscar un contacto clínico 


Las personas, aun las que no creen tener conducta desadaptada, pueden buscar ayuda
para sí mismas por infelicidad personal. Otros pueden hacerlo para alguien más debido a su preocupación por el bienestar de esa persona o por la seguridad de las personas a su alrededor. Algunas veces los problemas causados por la conducta de un sujeto provocan que las instancias legales o comunitarias le proporcionen la ayuda.


En la búsqueda de ayuda muchos pacientes encuentran personas en quien apoyarse y otras personas que han atravesado problemas similares superándolos y mejorando sus condiciones de vida.

¿En que podemos ayudarte? ¿Para que estamos?






En SMI (Salud Mental Integral) brindamos servicios integrales de atención para las personas que adolecen problemas conductuales, necesitan consejería y asesoría sobre síntomas que son difíciles de explicar con sus propias palabras ya que muchas veces "solo quien lo padece sabe por lo que están pasando"

Entre los servicios que brindamos se encuentran:


  • Atención psiquiátrica por médicos especialistas en psiquiatría y salud mental.
  • Diferentes tipos de psicoterapias.
  • Tratamiento farmacológico
  • Ingreso hospitalario
  • Consejería
  • Evaluación psiquiátrica y del estado mental
  • Asesoría online sobre síntomas o trastornos conductuales.